En AMIANCO sabemos hacer las cosas bien. Nuestra prioridad es la realización de trabajos conforme a ley, dando un servicio de primera a nuestros clientes. Para conseguir tal fin, siempre aplicamos las mejores prácticas, recopiladas de las organizaciones de referencia en la gestión de residuos. Para lo cual, dividimos inicialmente cualquier proyecto atendiendo a tres categorías:
- Trabajos con posible presencia de amianto (por ejemplo, edificios en los que existe el
riesgo de encontrar amianto de manera inesperada, debido a que se disponga de
documentación incompleta o a que sólo se haya llevado a cabo una retirada parcial
del amianto); - Trabajos en los que la exposición al amianto suspendido en el aire sea
previsiblemente baja; - Trabajos que entrañen un mayor riesgo de exposición al amianto suspendido en el
aire y de los cuales vayan a ocuparse contratistas especializados.
En base a estas tres categorías, desplegamos una operativa que incluye en mayor o menor medida alguno de los siguientes puntos, dependiendo del tipo de trabajo a realizar:
- Planificación y preparativos necesarios antes de iniciar los trabajos, es decir, una evaluación del riesgo, la preparación de las instrucciones por escrito (o del plan de trabajo), el proceso de toma de decisiones sobre los trabajos que se van a llevar a cabo, la consideración de si los trabajos merecen tratarse como trabajos de notificación obligatoria y de si se requerirá vigilancia médica, y la formación que debe impartirse al personal.
- Medidas que deben tomarse para los trabajos en los que esté presente el amianto (o pueda estarlo).El equipo necesario; el planteamiento general para controlar la exposición; los procedimientos que deben seguirse en los trabajos de mantenimiento en los que exista el riesgo de encontrar amianto; los procedimientos aplicables a trabajos que se hayan evaluado como trabajos de menor riesgo;los procedimientos aplicables a los trabajos con amianto de notificación obligatoria (por ejemplo, los trabajos de retirada de amianto).
- Aspectos particulares siguientes: la demolición, el trabajador y el entorno de trabajo, la eliminación de residuos, controles y mediciones, el resto de las personas que intervienen en los trabajos, como, por ejemplo, el cliente, los arquitectos y los administradores de las instalaciones del edificio, y el amianto en otras situaciones, como, por ejemplo, en vehículos y maquinaria.
- Vigilancia médica.
Con una metodología apropiada, y la implementación de procedimientos y rutinas adecuadas para los puntos indicados, garantizamos los mejores resultados para nuestros clientes, en todos nuestros trabajos.
AMIANCO es una garantía de éxito en su proyecto.
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